Una movilidad externa, Un bloqueo interno

A veces nos movemos de aquí para allá. Para ir a lugares a los cuales tenemos que ir y cumplir. Nos movemos  a velocidad, para no llegar tarde. Movemos nuestro cuerpo hacia varios lados. Así todos los días, y no paramos, no paramos.. Movemos el cuerpo ¿pero que pasa con otras partes de nosotros? Las detenemos. Detenemos nuestros pensamientos, bloqueamos nuestras emociones.
Nos movemos de aquí para allá, pero igualmente nos sentimos bloqueados.
A veces es necesario detener un poco el cuerpo, las acciones de todos los días, y deslizar esa sensación de movilidad y fluidez a nuestros propios pensamientos y emociones, para poder accionar sobre aquellas cosas que nos pueden alejar del bloqueo y hacer circular de una vez, y para siempre, nuestros propios deseos.