Volver a sentir
Volver a sentir
Creo que todos mis miedos tienen un sentido y todos mis sentidos tienen miedos. Por eso no logro recorrer el sentido de esos trenes fantasmas que tanto asustan dandole espasmos de soledad a mi corazòn. Despidiendome de repente tras esa puerta de irrealidades- ¿Cuantas garras tienen mis miedos? ¿De donde me estoy agarrando? Porque cuando me aferro a mì, dejo marcas en las paredes de mi ser. ¿Quien està allì? ¿Con quien estoy? ¿Estoy conmigo? A veces lato sola, y dialogo constantemente con mis desafinados sonidos que no saben que contestarme. Silencios. Cuevas de fragilidad que llueven en el recorrido interno de mi cotidianeidad. Y los dias se hacen de miel, de sal, de aire, de dudas y de perplejidades. Parece que el dolor no aburriese màs. Porque siempre està deambulandome. Susurrandome la espalda para salir a jugar. Dias que sienten por demas, dias que por demàs, no sienten. Dias de abrigos, de sàbanas rotas, de atropellos, de desordenes internos en un mundo de nunca jamàs. De amor hecho vidrio. Que corta. Y hay otros dìas, esos dias de nudos, en donde viajo sin parar por los agujeros de mis ataduras, perforando verdades. Rasguñando el cielo. Intentando desenredar mis làgrimas que quedan fragmentadas en esta lluvia de vida, que cae, como cascada inmòvil esperando desprenderse sin miedo. ¿Y si vuelvo a sentir? ¿Què?
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