Adormecer la noche

Sí. Se me está cayendo algo. No lo puedo alcanzar.
No me deja.
A veces aquellas cosas livianas pesan demasiado.
A veces los detalles no son humo solamente,
Terminan siendo el incendio mismo.

Las horas están secas.

Ya no se como manejar todo mi ser, que se siente atragantado bajo una montaña.
Está tapado en el medio de una gran lluvia de nada.
La tormenta está haciendose ver. ¿Se pronostica algo mejor?
Ayer abrí la ventana, Y dejé entrar la noche. Pero estabamos en otras sintonías.
La noche y yo no nos mirábamos la cara, No nos hablabamos.
¿Que se hace cuando uno está enojado con su propia piel?
No se puede arrancarla. Hace que no huyamos.
¡Que placer sería huir de uno mismo!
Arrancarse de a pedazos la puerta oxidada que uno tiene encima.
Y volar.
Por más que se quiebre la vida al querer arrancarse.
Volar.
Pegar un grito de dolor que lave todas las heridas del mundo.
Estar limpio realmente.
Sacar los vacíos que se enriedan como una enredadera en el medio de una casa abandonada.
Dificiles de cortar.
Crecen y se expanden involuntariamente.
Están tomando mis alas. Mi territorio. Están haciendome perder.

"Los detalles son aquellos que pueden hacer que uno se acueste con la noche cuando afuera hay vida".

Es querer morir unas horas para adormecer el dolor. Son engaños. Son sueños.
La vida está esperandote del otro lado de la vereda, cuando te levantes.
A veces te espera, con los brazos abiertos, perdonandote. Invitandote una vez mas a renacer,
Otras tantas, la vida te espera enojada, queriendo darte algun "chirlo". ¿Es preferible escapar? O ¿Hacerce cargo de aquello que hemos cometido?